viernes, 1 de mayo de 2009

CALIDAD SIN SORPRESAS

Qué gran sabor nos dejó el último concierto al que asistimos. Those Dancing Days visitaban nuestro país (ya era hora, por cierto) después de un discazo como con el que nos deleitaron el año pasado. Hartos ya de megastrellas archipromocionadas, hiperremasterizadas y de movimientos superestudiados asistimos a una actuación donde la naturalidad era la nota predominante. Nos sentimos como en la gala de fin de curso de último año de instituto orquestada por una voz de verdadero lujo. La garganta privilegiada de Linnea Jönsson fue lo más relevante de la actuación que no resultó especialmente animada ya que la gracia y el salero no es algo que corra por las venas de estas cinco chicas (suerte que les pagan por cantar y no por animar una fiesta). Será que vienen arrastrando en el ADN el frío de Suecia… Menos mal que el local, la [2] del Apolo, es como el salón de nuestra casa y la calidez corrió a cargo del público que puso mucho de su parte. Lástima que de vez en cuando las canciones se vieran un poco ahogadas en la percusión y que la música de esta formación en directo no sea lo que más llama la atención. Muy original la versión del Toxic de Britney Spears aunque algo manida ya que es la que vienen tocando en todas sus actuaciones y sus admiradores la tienen más que trillada del YouTube. Tristemente vaticinamos que si alguien llegará lejos en el grupo es Linnea. Mientras tanto, no adelantemos acontecimientos y sigamos disfrutando de este quinteto mientras tengan que ofrecernos más actuaciones como la del otro día aunque el factor sorpresa brillara por su ausencia.